Los vinos tintos son aquellos que proceden de mosto de uvas tintas con el adecuado proceso de elaboración que permite difundir la materia colorante contenida en los hollejos.
Elaboración
Se pueden obtener por dos vías fundamentales que son; el método tradicional, que consiste en que la vendimia una vez despalillada y estrujada es sometida directamente a un proceso de fermentación alcohólica con una segunda fermentación posterior (maloláctica) que suaviza y mejora el vino.
El método de maceración carbónica, que consiste en encubar directamente la vendimia, es decir con el grano entero, de forma que mediante un aporte inicial de gas carbónico para acelerar el proceso, se produce primero una fermentación intracelular hasta alcanzar los 3 o 4 grados de Alcohol. Posteriormente ya no quedan bayas enteras y el proceso de elaboración es muy similar al tradicional.
Una vez que estos vinos han sido elaborados, no se someten a procesos de envejecimiento, de forma que en poco tiempo están disponibles para ser embotellados. Los vinos de maceración carbónica (vino de cosecha) son los mas jóvenes, saliendo los primeros al mercado.
Características
En su aspecto destacan los tonos azulados que tienden al morado e incluso al violeta. Su aroma es muy frutal, con escaso contenido de componentes aromáticos evolucionados.
En España podemos encontrar vinos jóvenes elaborados con variedades como Garnacha, Mencía, Tempranillo, Monastrell, Cabernet Sauvignon, Bobal … entre otras.
Resultan muy adecuados para acompañar platos fuertes, con gran contenido graso, como los guisos de carne, al igual que quesos y pastas.